Desde que empezamos a publicar el blog en 2007 nunca hemos presentado los códigos QR como la panacéa, sino como un recurso con gran potencial en una serie de contextos y situaciones.
De los creadores de "Códigos QR vs Datamatrix", "Códigos QR vs Bidi", "Códigos QR vs Realidad Aumentada", "Códigos QR vs Bluetooth" hoy presentamos "Códigos QR vs NFC".
A menudo se producen debates sobre distintas tecnologías en los que se intenta dilucidar: "¿Qué es mejor A o B?". La respuesta en la mayoría de los casos es depende y este post no será la excepción.
Desatornillar un tornillo con un martillo o clavar un clavo con un destornillador pueden ser misiones imposibles (y estúpidas).
El dogmatismo, la ignorancia, los intereses comerciales, la cerrazón y/o la disonancia cognitiva nos llevan a menudo a afirmar que "lo nuestro" es lo mejor y que "lo suyo" es lo peor y debe desaparecer.
Presentemos a los contrincantes…
QR Code vs. NFC A su izquierda: QR-Code (Quick Response Code)
- Origen. Evolución de los códigos de barras tradicionales.
- ¿Qué son? Símbolos/códigos imprimibles en cualquier soporte físico.
- Interacción. Descifrados mediante una aplicación lectora (gratuita) que usa la cámara del smartphone.
- Coste. El propio de la impresión y no necesita tecnología adicional.
- Aplicaciones. Actualmente su principal uso es acceder a URLs, tarjetas de vista, SMS, etc. pero a medida que los fabricantes adopten estándares, los códigos QR podrán dar a los smartphones instrucciones cada vez más complejas: introducir tareas en la agenda, conectar a wifi o silenciar el teléfono.
- Generación. Desde un generador en local u online se puede crear un QR (sin coste) y usar esa imagen en cualquier contexto.
- http://en.wikipedia.org/wiki/QRcode
A su derecha: NFC (Near Field Communications)
- Origen. Variación de los RFID (Ej. Teletac)
- ¿Qué son? Chips que permiten en intercambio de datos. Los chips NFC están orientados a la interacción ente chips/dispositivos en la corta distancia (<15 cm.) y sin necesidad de batería.
- Intreracción. Con un smartphone preparado para interactuar con NFC basta con acercarlo al chip y se puede leer y programarle instrucciones.
- Coste. Aprox. 1€ (según volumen)
- Aplicaciones. Al tratarse de hardware todas las funciones de el smartphone que el fabricante permita realizar via NFC se pueden programar, así como visitar una web del mismo modo que al capturar un QR sin necesidad de enfocar nada.
- Generación/programación. Para asignar una instrucción/es a un NFC hay servicios profesionales que programar chips de forma masiva para su uso en marketing, logística, etc. o directamente con el smartphone del usuario para uso particular. Una vez programado un NFC se puede «dejar abierto» o «bloquear» futuros cambios en su contenido.
- http://es.wikipedia.org/wiki/Near_Field_Communication
Y ahora, sin ánimo de ser exhaustivos…
Casos y contextos en los que se imponen los códigos QR
En soportes físicos de producción masiva. Ej: periódicos, revistas, folletos, packagings, etc…
Por barato que pueda llegar a ser un chip NFC el coste del chip junto con la manipulación del pegado nunca lo harán competitivo con la impresión de un códigos QR.
En situaciones en que la interacción se realice a más de 15cms. Ej: vallas publicitarias, edificios, grandes pantallas de información, arte, etc…
En el mundo real el «call-2-action» o llamada de atención de puede realizar con más facilidad del mismo modo en en pantalla si «el botón es grande». Invitar a capturar un QR en ocasiones será más fácil y práctico que invitar a «tocar» un NFC.
Acciones masivas de marketing. ticketing o logística personalizadas. Ej: entradas, tickets, promociones, puertas de embarque, etc.
El QR puede ser impreso o enviado a un terminal por mail, MMS, etc. En estos casos enviar un NFC físicamente será más caro y complejo que tener un lector en el punto de venta, punto de acceso, etc…
La aplicación Passbook de Apple que viene en el nuevo iOs 6 basa la gestión de ticketing en códigos QR que el usuario «guarda» en su smartphone y que luego leerá el vendedor.
Casos y contextos en los que se impone el NFC
Acciones de marketing de cercanía/intimidad.
Ej: NFC adherido en mesa de cafetería que invite a hacer checkin, o un follow a una cuenta de twitter, asiento del bus, etc.
Cuando por cercanía con el NFC la interacción sea más simple que capturar un QR tiene más sentido usar NFCs. Cuanto más fácil sea la interacción más probable es que ésta se produzca.
En todo caso los defensores de los NFC tienen que cuidarse bien de abusar de esta tecnología porque si se usa de forma invasiva del mismo modo que se usó el bluetooth puede generar rechazo.
Ej. gestión de pagos en el punto de ventaLa simplicidad en la interacción y el coste de la tecnología apuntan al NFC como un excelente gestor de sistemas de pago
Destacan de todos modos sistemas de pago que usan códigos QR como acciones realizadas por PayPal para trasladar al mundo real la compra y los sistemas pago on-line.
Ej. NFC en la mesilla que silencie el móvil y fije la alarma, conexión a wifi doméstica, activación del GPS en e coche, etc…Los NFC pueden ser fácilmente programados por el usuario para realizar las tareas que le permita su smartphone (incluso un batch de tareas!). En este caso los problemas de estandarización (ver más adelante) no serían críticos ya que sólo habría un usuario.
Sería poco lógico que se imprimiera un QR de conexión a una WIFI doméstica pudiendo tener un chip que active dicha operación. Además, es poco probable que los fabricantes se «atrevan» a ceder control de los terminales via códigos QR, aunque quién sabe...
Problemas compartidos:
El problema de los defensores de los QR es que un smartphone de serie no trae un lector de QR ni los interpreta la cámara. La ventaja en este caso es que una vez descargado un lector (software) ya se pueden leer cualquier QR.
Por otro lado, para que un smartphone capture un chip NFC necesita un componente (hardware). Si un modelo cuenta con NFC de serie el usuario podrá beneficiarse de esta tecnología, si no lo lleva no. Así de fácil. No updates.
La reciente aparición del iPhone 5 frustró muchas expectativas entre los seguidores del NFC porque el nuevo terminal de Apple no incluye el chip necesario para interactuar mediante esta tecnología (¿tal vez el 5S?).
Por su parte los últimos modelos de Galaxy parecen más comprometidos con la tecnología NFC y ya los incorporan tanto a nivel de hardware como con una innovadora interfaz de programación de los chips NFC.
El primer requisito para que un servicio/tecnología se popularice es que los posibles beneficiarios conozcan de su existencia y su funcionamiento.
Los evangelistas y early-adopters de una tecnología deben medir muy bien los tiempos (time-to-market) para crear modelos de negocio válidos y encontrar aplicaciones que tengan sentido.
En una fase inicial se debe hacer mucha difusión y pedagogía. La mejor estrategia es demostrar la utilidad y los beneficios reales que obtendrá el usuario.
Tanto los códigos QR como los NFC están en el proceso de creación de una masa crítica suficiente para su generalización. Esta gráfica de Gartner ilustra el desarrollo/popularización habitual de una avance tecnológico según lo que han venido a llamar «Hype Cycle».
Del mismo modo que el usuario debe conocer y saber usar la tecnología, las empresas/personas que la implementan deben ser también conocedoras de sus características, capacidades y sus limitaciones.
Ej. La cantidad de campañas que utilizan campañas con códigos QR que apuntan a páginas no optimizadas o inaccesibles desde un smartphone es una muestra de un mal uso del recurso.
El smartphone deberá entender la información que contenga el QR/NFC y obrar en consecuencia. Para ello se debe definir un idioma: unos estándares que deberá interpretar la aplicación lectora.
Por ejemplo, para que al capturar un QR/NFC se cree una entrada en la libreta de direcciones con los datos de una tarjeta de visita se deben poner de acuerdo:
- el generador del QR/NFC
- los creadores de aplicaciones lectoras (en caso de los QR)
- los fabricantes de terminales
- los desarrolladores de sistemas operativos
Organismos como la Open Mobile Alliance, la Open Handset Alliance o la GSMA deberían agilizar y mediar en estos complejos procesos, pero con el ritmo de innovación actual y habiendo conflictos de intereses entre los miembros (fabricantes, operadoras y desarrolladoras) no es tarea fácil.
Conclusiones
Parece que no hay ganador sino situaciones en los que un recurso es más adecuado uno que otro.
Durante un periodo creemos que para el marketing de proximidad y la interacción de los humanos con la red se producirá desde el smartphone los QR-Codes y los NFC serán los activadores-estímulos-facilitadores externos principales durante un tiempo. Ahora es el momento de pensar en aplicaciones, modelos de negocio, jugar, divertirse, etc.
La simplicidad de los QR contrasta con la complejidad NFC (que no quiere decir que su uso sea complejo). Los intereses de fabricantes, players de ecommerce, buscadores, etc… también influirán en qué tecnología se usará en según que contexto.
Las posibilidades que abre la realidad aumentada, el Project Glass de Google, la evolución en el mundo de los sensores y en la geoposición hacen de la predicción una misión tan imposible como tentadora, pero no es el cometido de este post.
Creemos que como siempre… «the best is yet to come».
¿Y qué pasa con el Bluetooth?
Parece que se ha autodescartado como herramienta de marketing de proximidad, principalmente por su naturaleza invasiva y el abuso en las promociones de escaso valor tan propias de la publicidad en España.
El principal valor del Bluetooth es la velocidad de transmisión y el volumen de datos que se pueden compartir. La actuales velocidades de las redes 3G y las futuras 4G desde las que se puede descargar video en steaming sin problemas parece el Bluetooth quedará relegado como un sistema para emparejar dispositivos (que no es poco).