El papel se convierte en un artículo de lujo
No es sólo por la crisis del coronavirus que los vendedores, las empresas y los clientes han llegado a apreciar los códigos QR. En ese momento, servían para evitar el papel por razones higiénicas, por ejemplo, para los menús digitales o el registro de huéspedes, pero ahora se trata de sustituir los materiales gráficos impresos por razones puramente de mercado. Aquí puedes averiguar por qué es así y por qué tú, como proveedor de códigos QR, puedes afrontar la crisis del papel con más tranquilidad.
Lo que antes se arrugaba descuidadamente y como mucho se enviaba a reciclar, es ahora un bien escaso y precioso: el papel (de desecho). Apenas hay un ámbito en el que no se haga sentir la actual evolución dramática de la escasez de recursos, los retrasos en el suministro y el aumento de los precios. Se ve especialmente afectado el mercado del papel, que apenas puede satisfacer la gran demanda de material de impresión gráfica, o sólo a precios astronómicos.
¿Cuáles son las causas de la crisis del papel?
Hay muchas razones para el aumento de los precios del papel, y hay varios factores en juego.
Falta de materias primas
Dado que la disponibilidad global de madera está disminuyendo, hay una escasez general de materias primas en el mercado.
Aumento de los precios de la energía
El aumento de los precios de la energía está haciendo subir el coste de la producción de papel, que depende en gran medida del gas. Para algunos productores, ya es tan poco rentable que están interrumpiendo o reconvirtiendo sus servicios.
Capacidad de producción restringida
Hay una escasez general de mano de obra cualificada en el mercado laboral, lo que obliga a reducir las capacidades de producción. En consecuencia, se producen cuellos de botella en la oferta.
Elevados costes de transporte
Los altos precios del combustible repercuten en los costes de transporte del papel.
Digitalización y comercio online
Debido a la digitalización, el mercado del papel se está reduciendo, pero la demanda de materiales de embalaje para el floreciente comercio en línea se está disparando. Por ello, los fabricantes están pasando a producir cartones de pasta de papel en lugar de unidades de impresión. Esta tendencia es irreversible, por lo que es probable que la situación empeore aún más en el futuro.
En principio, casi cualquier material impreso, como folletos, flyers, cupones, tarjetas de visita, etc., podría ser sustituido por un código QR que lleve a una versión digital del material publicitario sin comprometer la experiencia del cliente ni cargar el presupuesto publicitario. Además, no tienes que preocuparte por quedarte sin papel.
Digitaliza tu material impreso en alta calidad, por ejemplo como archivo PDF, o crea un sitio web. Asegúrate de que es "apto para móviles", ya que los códigos QR se escanean casi exclusivamente con un teléfono móvil.
2. Enlaza la versión digital con un código QR dinámico
Decídete a utilizar códigos QR dinámicos, ya que esto te dará flexibilidad en caso de que quieras cambiar el contenido. Puedes utilizar el mismo código QR y cambiar dinámicamente la página que hay detrás sin tener que reimprimir el código QR.
3. Crea códigos QR de diseño personalizado para conseguir más visibilidad
Si quieres personalizar tu código QR, por ejemplo con tu logotipo o colores llamativos, genera tu propio código QR de diseño. Un atractivo código QR de diseño con una llamada a la acción debajo tiene más probabilidades de ser escaneado que un código QR en blanco y negro.
Utiliza códigos QR en formato vectorial como .eps, .pdf o .svg, y presta también atención a la calidad de la impresión para que el código QR sea siempre nítido.
5. Muestra el código QR en pantallas
Para ahorrar papel, también puedes mostrar el código QR en las pantallas publicitarias del metro, por ejemplo, o en tu propio smartphone como imagen de fondo.
El papel no siempre puede evitarse, y muchas personas no quieren perderse la experiencia táctil que ofrece el papel. Si lo combinas con códigos QR, puedes ofrecer un excelente servicio a este grupo objetivo, así como a tus clientes online.
Sin embargo, para reducir tu necesidad de papel, los siguientes consejos te ayudarán:
Reparte tarjetas de visita con código QR
En lugar de repartir tarjetas de visita, haz que tus contactos escaneen un código QR almacenado en tu teléfono móvil con tus datos personales. De este modo, tus datos también se pueden transferir automáticamente a la lista de contactos del destinatario. Los códigos QR de tarjeta de visita digital lo hacen posible.
Coloca códigos QR en los soportes para folletos y en los expositores
Limita tu material informativo "tocable" a las copias de visualización, o a un número limitado de ellas, pero adjunta un código QR claramente reconocible directamente en tu espacio de presentación que mapee de forma idéntica el material informativo.
Acorta el contenido de tus materiales impresos y proporciona información más detallada al respecto mediante un código QR.
Imprime códigos QR en materiales alternativos
Los códigos QR no sólo funcionan en papel. Experimenta e imprime los códigos QR en materiales alternativos.
Las ventajas del código QR son claras
En comparación con el papel, es "inagotable" y de precio estable
Con los códigos QR no tienes límites y puedes crearlos en gran cantidad con nuestro generador de códigos QR, por ejemplo.
Gran aceptación por parte de los clientes
Los códigos QR se han establecido en el mercado y un gran número de personas utilizan los códigos QR a diario.
Una herramienta de gran eficacia utilizada en todo el mundo
En todo el mundo, los códigos QR son conocidos y utilizados para el marketing.
Proporciona accesibilidad
Ya que casi todos los teléfonos móviles tienen un escáner de código QR.
No es un producto desechable y, por tanto, es respetuoso con el medio ambiente
Al utilizar los códigos QR, no sólo tienes una gran herramienta de marketing, sino que también ayudas a proteger nuestro medio ambiente.
Así que el código QR se presenta como una herramienta de marketing e información muy económica en tiempos de escasez de recursos y presión inflacionista.